LEY DE LA JUNGLA

Hay tantos que viven por vivir,
otros no saben ni porque viven
pero viven viendo del otro
y mientras del otro vivan
vivirán ambos
como si ninguno viviese.

Es la ley de la jungla
esa jungla que tiene águilas negras
que vigilan serpientes para comer como en la neveria
y al dos por uno se alimentan
pues cazan a las serpientes
después que estas se alimentó con ratones.

Es la misma ley…
Esa, en la que el diputado se basa
para cambiarle la moneda al país,
para vender cargos gubernamentales,
para negociar la presidencia del salón azul,
para hacer y deshacer decretos…
Es la misma ley
Ley de la jungla.

Ley que aprenden los estudiantes de derecho
y cinco, seis, o siete años más tarde
no la recordaran ni respetaran.
Es esa misma ley que restringe
y es esa misma que da libertades.
Esa que esta escrita en papel
y se vende en las librerías
pero que no pasa de ser una simple ley
porque es la ley de la jungla.

¿Y la jungla?
Esta mantiene su clima de nubosidad
donde los doctorados, ingenierías, licenciaturas
conforman parte de la selvática vegetación.
Pero en medio de tanto hay caminos a seguir
unos llevan tours por Europa
ese es el de los políticos por salir.
Para otros esta la violencia, drogas
y en fin, el que vive tiene caminos
entre los que debe escoger.

Abner Portillo